En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
«La historia que os propongo no es la de mi vida como actor, autor y director, sino más bien un fragmento de mi infancia», afirma Dario Fo. Si es cierto que en los primeros años se fragua la personalidad e intelecto de un individuo, es fácil atisbar el genio del Premio Nobel de Literatura en la sorpresa con que observa el cambiante mundo que le rodea durante sus primeros diez años de vida.
Fo creció cerca del lago Maggiore, en Porto Valtravaglia, un lugar habitado por los apodados «murciélagos», trabajadores de los grandes hornos de la vidriería o la cal, pescadores y contrabandistas que vivían prácticamente de noche. Entre ellos, los personajes más fascinantes y respetados eran los cuentacuentos y los fabuladores, gloria y orgullo del pueblo entero.
El país de los cuentacuentos comienza en 1926 y anticipa destellos de cuanto cambiaría para siempre con el estallido de la segunda guerra mundial. Con una prosa desnuda, de gran fuerza visual, Darío Fo recrea un mundo real fascinante, próximo a los colores cinematográficos de una gran ficción.
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.