Berta es una meona desde pequeñita. Gracias a ello sus padres conocieron gran cantidad de restaurantes de carretera, pues no había manera de viajar en coche sin hacer dos o tres paradas en el camino. Jamás confesará que en la intimidad se saca los mocos, pero, eso sí, usando el meñique porque cree que resulta más refinado. No se los come, menos mal, pero tampoco confiesa qué hace con esas bolitas, algo que resulta bastante inquietante. Hizo este libro aceptando la entusiasta y algo alocada propuesta de Juan, el editor, con quien ya había ilustrado otro libro: Cambio climático. No sabía bien dónde se metía, pero reconoce que ha sido un viaje muy divertido y que ha aprendido muchísimo. Su trabajo como ilustradora ha sido seleccionado en ferias de todo el mundo: Italia, Reino Unido, China, Emiratos Árabes Unidos, Portugal, Serbia Y todas las que vendrán, porque, además de meona, es muy buena ilustradora.
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.