En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
El filósofo alemán Odo Marquard proponía la siguiente paráfrasis de una célebre cita kantiana: «La filosofía sin experiencia es vacía, la experiencia sin filosofía es ciega». ¿Tal vez para escribir sobre la experiencia con drogas se requiera de un estilo distinto al de los sistemas filosóficos dominantes? ¿Y para ello la literatura sea un manantial de experiencias? Estas confesiones no tienen el propósito de animar al consumo de drogas, pero tampoco a desalentar a quien se le antoje probarlas. Siguen la máxima de Elias Canetti: entablar el diálogo con el interlocutor más cruel que no es sino uno mismo. Debemos prepararnos para la posibilidad extrema de que la filosofía sucumba como materia de enseñanza e imaginar de qué manera el amor al saber siga subsistiendo en la sociedad venidera.
Enrique Ocaña Fernández (Valencia, 1965), es doctor en filosofía por la Universidad de Valencia y ha desarrollado labores de investigación en Alemania e Italia. Ha publicado los siguientes libros: El Dionisos moderno y la farmacia utópica (1993), Más allá del nihilismo (1993), Duelo e historia (1996) y Sobre el dolor (1997). Ha alternado la escritura con la labor de crítico literario y traductor del alemán, en concreto obras de Ernst Jünger, Gottfried Benn, Jean Améry y Odo Marquard.
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.