En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
Don Cunegundo era un magnate hombre de negocios era ya viejo gordo barrigudo , mal humorado, vivía en un castillo medieval , toda su vida se había dedicado a los negocios; con una palabra podía vender, perder grandes empresas. Tenia 10 socios y diez empleados de la servidumbre, sus socios le tenían miedo al igual que sus empleados, ellos siempre vestían con trajes negros. Los de la servidumbre le habían puesto apodos como el chacal, un día se enfermo y tuvo que salir de su castillo para ir al medico. El medico le recomendó que saliera a caminar he hiciera algo de ejercicio pues lo necesitaba. Cuando regreso del medico en du lujoso coche vio en las tiendas multicolores de farándula, se acerco y les dijo que ellos no tenían porque estar ahí, Max le respondió que solo estaban de paso y que se irían pronto, además no estaban en du territorio; son Cunegundo se alejo del lugar indignado. El rio se desborda Son Cunegundo estaba dispuesto a seguir las indicaciones del medico y salió a pasear, puso observar lugares que el no conocía en su castillo, cuando atardecía el volvió a su casa y cando paso por una rendija pudo escuchar las voces y las risas de los de la farándula y entonces le vinieron recuerdos a al mente, un rato después oscureció y se marcho.
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.