En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
Atreverse a entrar en el mundo de la política es como la vida: aprendes, te equivocas, te mienten, pasas miedo, te enamoras, y finalmente, te largas. En este libro te darás de bruces con una realidad cruda y desalmada, pero llena de esperanzas y de ganas de cambiar el mundo. Es el relato de ocho años en los que la autora pasa de ser una trabajadora social más a una responsable pública en Granada, en un momento en el que el ejercicio de la política estaba denostado y las injusticias seguían ocurriendo en cualquier rincón: desahucios, hambre, cortes de luz... Con una actitud siempre contestataria, las amenazas no tardaron en llegar, y la farándula municipal se convirtió entonces en una montaña rusa. Entre el relato de lo cotidiano de la política municipal, aparece Montse, un paréntesis de realidad que acompañó a Jemi Sánchez mientras fue Concejala del Ayuntamiento de Granada. Plenos, mociones, droga, prostitución y abusos. Todo mezclado. Una historia real que tenía que contarse. Entre vivencias se presenta la radiografía de una Granada noble frente a la otra cara de la ciudad que se ignora: el Distrito Nor
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.
