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En una época en la que el surf es más popular que nunca, conviene recordar los años que lo popularizaron. Desarrollado por los isleños hawaianos hace más de cinco siglos, el surf alcanzó su auge en el continente en la década de 1950, convirtiéndose no solo en un deporte, sino en una forma de vida, admirada y exportada a todo el mundo. Uno de los creadores de imágenes clave de ese período es LeRoy Grannis, surfista desde 1931, quien comenzó a fotografiar la era del longboard a principios de la década de 1960, tanto en California como en Hawái. Esta edición recupera la escalofriante Edición de Coleccionista de Grannis, agotada, seleccionada del archivo personal del fotógrafo, para mostrar su obra más vibrante en un formato compacto y asequible, desde la dicha de atrapar la ola perfecta en San Onofre hasta las dramáticas caídas en la famosa Costa Norte de Oahu. Innovador en el campo, Grannis fijó una caja impermeable a su tabla con ventosas, lo que le permitía cambiar la película en el agua y estar más cerca de la acción que cualquier otro fotógrafo de la época. También cubrió el emergente estilo de vida surfe
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