En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
Mariluz Escribano Pueo (Granada, 1935-2019) ha sido, desde la publicación de su primer poemario en 1991, parte de lo que se ha venido a denominar por la crítica como 'literatura sumergida'; es decir, aquella que, a pesar de su evidente calidad, ha estado oculta a los ojos de la mayoría, como los pecios cargados de tesoros en el mar. Su situación como autora ageneracional y un carácter fuerte que la distanció de cenáculos literarios, dificultó su proyección en los primeros años, pero la rotundidad de su verso y su compromiso ético acabó por imponerse con la publicación de Umbrales de otoño (2013, Premio Andalucía de la Crítica). Después vinieron El corazón de la gacela (2015) y Geografía de la memoria (2018) que consolidan una trayectoria fecunda donde fondo y forma se dan la mano para erigir a Escribano como una de las poetas esenciales de la segunda mitad del siglo xx. Y como la literatura es una patria compartida, en este volumen se reúnen treinta de sus poemas más emblemáticos comentados por algunos de los principales autores de la lengua española. Así, Raúl Zurita, Luis García Montero, Antonio Gamoneda,
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.