En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
La inspectora Pozo ha matado a su único sospechoso.Después de tres años durante los que el Asesino de Muñecas ha estrangulado a sus víctimas bajo la lluvia interminable que asola Madrid, y de recibir mensajes que amenazaban a su hija, Pozo y su compañero han acabado con él. Sin piedad. Todo para terminar con la pesadilla. La ciudad respira mientras el agua sigue cayendo, la inspectora y su subinspector comparten a escondidascama y culpa, y las redes aplauden a sus héroes anónimos. Hasta que aparece otra víctima, resucitando el pasado de hace veinte años. Un pasado que atormenta a unos amigos que, tras una fiesta universitaria con demasiadas drogas, no recuerdan quién de ellos mató a una joven poeta. Uve. La que obsesiona a todos.Implacable, el asesino envía una cuenta atrás de mensajes a la inspectora Pozo, amenazando con destrozar lo poco que le queda si se empeña en encontrarlo. Pero, cuandolos mensajes se acaben, ¿quién será la última víctima?s ni imaginar.t Fiction for Young AdultsBook Sense PickHorn Book Fanfareesperando por nosotros». ms, un ensayo crudo y alentador sobre los modos de es
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.