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Fármacos con los que tratar enfermedades, venenos para cazar y asesinar, estupefacientes legales e ilegales, aromas, materiales, tintes? de todo ello contiene la naturaleza en abundancia, como bien ha demostrado nuestra especie sacándoles provecho desde tiempos inmemoriales. Algunos resultarán relativamente conocidos para el lector, como la penicilina, la morfina, el caucho o la cocaína, y otros no; aunque eso no significa que su importancia sea menor. Acaso gozaron de popularidad en su momento, y su estela se perdió por el camino, o son ilustres desconocidos cuya valía merecería mayor repercusión. Adéntrese en la fabulosa historia de las drogas, los fármacos y los venenos de uno de sus mayores conocedores, el químico David Sucunza. Esta obra narra el enorme impacto que algunos productos naturales han tenido en nuestra historia. Y lo hace a través de veinticinco capítulos ilustrativos, por los cuales desfilan un buen número de saberes entrecruzados: la química nos habla de su estructura, la biología de su función en los organismos que los originan, la medicina se encarga del efecto que muchos de ellos pr
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