En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
Gregorio Morán (Oviedo, 1947) es uno de los escritores y periodistas más singulares (y por lo tanto más raros) del último medio siglo. Quizás lo que más y mejor le distinga sea su feroz sentido de la independencia intelectual, una independencia no se sabe si asesina o suicida, pero siempre mortal, mortalmente afilada. Aparte del poco atendido, muy justiciero y valiosísimo Asombro y búsqueda de Rafael Barrett, aparte de sus famosísimas y añoradas «Sabatinas intempestivas» en La Vanguardia, que no solo realmente aparecían los sábados, sino que eran también realmente intempestivas, ha publicado numerosos y muy discutidos libros sobre la tribu política y la tribu literaria en editoriales grandes y comerciales, pero también libros de carácter literario en editoriales de prestigio, como la riojana Pepitas de Calabaza. En ella apareció o reapareció en 2015 el implacable Nunca llegaré a Santiago, su libro más literario y narrativo junto con El viaje ruso de un vendedor de helados, que ahora aparece o reaparece en esta casa editorial. Si Nunca llegaré a Santiago participaba de varios géneros literarios, y tenía mucho
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.