En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
La redacción de Guerra en España, el más anómalo de los proyectos editoriales de Juan Ramón Jiménez, se inició en paralelo a la contienda que le dio título, cuando ni el poeta ni su mujer, Zenobia Camprubí, vislumbraban que tras su salida de Madrid en 1936 nunca regresarían a su país en vida. Consciente de las críticas que su actitud política y la naturaleza unilateralmente lírica de su poesía habían suscitado, y dolido por las calumnias que sobre su persona se difundieron a ambos lados del Atlántico, decidió recopilar en un volumen misceláneo un conjunto de materiales diversos propios y ajenos en los que quiso aclarar los puntos más conflictivos y polémicos al respecto. Hasta principios de los años cincuenta reunirá bajo este título: diarios, aforismos, poemas, traducciones, notas autobiográficas, artículos, conferencias, semblanzas, cartas, entrevistas, fotografías, manifiestos y críticas cuyo único denominador común es su estricta vinculación con asuntos relacionados con la guerra civil, el exilio y las consecuencias que tuvieron tanto en su vida como en su obra. Guerra en España, por tanto, supone una
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.