En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
Esta cautivadora obra, ambientada en los días más sombríos de la posguerra española, nos introduce en un viaje a través del tiempo y la memoria. Alma, una niña marcada por la desolación y el hambre, teje su historia entre las sombras de la pérdida de José, su padre, y la ausencia de la figura materna. Su voz nos sumerge en un relato intimista y desgarrador, donde la fortaleza surge del dolor y la pureza y la bondad son la luz en la oscuridad, en tanto los hilos de su biografía se entrelazan con la cruda realidad de una España desgastada por el conflicto. En su piel exploramos la capacidad humana para renacer de entre las cenizas y enfrentarnos a nuestros temores más recónditos. Los niños del hambre" es una crónica de autodescubrimiento, valentía y esperanza en un mundo en el que el espíritu humano puede hallar redención incluso en los momentos más aciagos. "Aunque toda regla tiene su excepción, ser buen narrador no es posible cuando no se tiene alma de poeta. Y la palabra poética de A. Francia siempre ha estado empapada de un sesgo narrativo al modo de poetas tan claros como Rubén Darío, Juan Ramón Jiménez
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.
