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Lo primero que hizo la mejor plantilla de la historia del Real Sporting de Gijón fue descender. Sin embargo, los Quini, Castro, Maceda, Ferrero y Mesa volvieron a la división de honor del fútbol español en 1977 y lo hicieron para marcar una época. Un subcampeonato de Liga, dos de Copa y media docena de participaciones en competiciones europeas jalonaron la etapa en la que el Eurosporting era un temible rival, capaz de golear al FC Barcelona en el Camp Nou, de derrotar al AC Milan de Van Basten, Gullit y Donadoni en El Molinón o de ser el equipo que más jugadores aportaba a la Selección española. La fórmula de su éxito se cimentaba en una cuidada selección de sus fichajes y una cantera prodigiosa que aportaba regularmente hornadas de jugadores excepcionales: primero, los hermanos Ablanedo, Joaquín, Cundi, Eloy Olayaà Más tarde, Abelardo, Luis Enrique, Manjarín, JuaneleàEl periodista Rafa Quirós fue testigo privilegiado de ese tiempo, como seguidor y como cronista deportivo para Radio Nacional de España durante más de treinta años. De lo vivido entonces deja constancia en esta formidable memoria sentimental de
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