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Espero que mi testimonio cambie tu perspectiva sobre la adopción. Escribiendo este libro yo ya lo he hecho. Desde que tengo uso de razón me he sentido profundamente diferente a los demás. Aunque vivo en España desde antes de tener memoria, nací en Rusia. Mi historia es bastante simple: una niña que no pudieron cuidar, abandonada en el hospital para luego ser adoptada tres años después por una madre española. Pero esa historia se vuelve compleja cuando reflexiono sobre las consecuencias que provocó todo: cómo llegué a no sentir dolor, hambre o frío, en definitiva, a disociarme, o cómo me refugié apoyándome en cualquier persona sin distinguir el valor de un abrazo. Cada vez que de niña no me sentía querida venía la pregunta: "¿Por qué me pasa esto a mí y a los demás no? ¿Por qué soy diferente?" Me lo explicaron cientos de veces y, aunque mi madre se mostraba comprensiva, mi respuesta siempre era la misma: "no lo entenderías". Porque así me sentía, incomprendida. Cuando al fin crecí empecé a comprender cómo me habían afectado el abandono y la falta de atención en mis primeros años. Quizás esta historia no es la tuya, quizás ahora tampoco ya sea mía: tal vez es la de todos. Espero que lo entendáis ahora.Luda Merino nació en Kochenevo, Rusia, el 27 de marzo de 2001 y fue adoptada por una madre española cuando tenía sólo 3 años. Vive en Madrid desde entonces.

Aunque es Diseñadora gráfica y Artista Digital, al cumplir los 20 empezó a dar testimonio en redes sociales y medios de comunicación del impacto que el trauma temprano tuvo en su infancia y adolescencia con la esperanza de ayudar a otros adoptados y sus familias a sentirse identificados y conocerse a sí mismos y a quienes les rodean.

Además de su activismo en temas de adopción, Luda es la creadora de "Restaurando su Dignidad," (en X, @RestaurandoDign) un proyecto que cuenta ya con casi 200.000 seguidores y se encarga de restaurar y colorear digitalmente fotografías históricas de víctimas del fascismo, contribuyendo a la preservación de su memoria.