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Schopenhauer es sin duda uno de los pensadores más leídos de la modernidad. Consciente desde muy temprana edad de su genio y convencido de que la vida «es una cosa miserable», dedicó la suya a preguntarse por el sentido de la existencia y a pensar en el mejor modo de evitar el sufrimiento. A los treinta años expuso su sistema metafísico en un libro extraordinario, El mundo como voluntad y representación, pese a lo cual el medio académico y el público culto de su época lo ignoraron durante décadas, mientras Fichte, Hegel o Schelling se consagraban. La obra magna del filósofo pesimista tardó mucho tiempo en ser reconocida, pero cuando lo fue, al final de su vida, cosechó un éxito imperecedero. Contemporáneo de Goethe y Napoleón, Schopenhauer viajó por Europa, se sintió cosmopolita desde joven y aprendió a pensar desde la experiencia. Moreno Claros, con profundo conocimiento y comprensión de la vida y la obra del filósofo, nos ofrece una semblanza instructiva y amena de las complejidades de un pensador que ha fascinado a autores tan diversos como Nietzsche, Tolstói, Proust, Mann, Zweig, Wittgenstein o Borges.
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