Libros

Comentarios

La presente obra realiza un pormenorizado análisis de los principios que sustentan el modelo de descentralización territorial del poder en la Europa comunitaria.



El mismo permite concluir que la flexibilidad que caracteriza al sistema de distribución de competencias europeo, manifestada esencialmente en el carácter funcional de las competencias atribuidas a la Comunidad, posibilita una considerable expansión de la actividad normativa comunitaria que puede así afectar al ámbito de actuación normativa de los Estados miembros. Afección que, no obstante, se vería compensada por la relevancia que tienen esos mismos Estados miembros en la determinación de la propia actividad normativa comunitaria.



En el modelo europeo de descentralización territorial del poder, la función de garantía de un ámbito propio de decisión de los Estados miembros no se habría residenciado singularmente en la capacidad del Tribunal de Justicia para interpretar restrictivamente el alcance de las amplias competencias atribuidas a la Comunidad, ni en la capacidad del Tribunal de Justicia para imponer límites eficaces al ejercicio de las competencias comunitarias, sino que se habría residenciado fundamentalmente en la participación de los representantes estatales en la adopción de los actos comunitarios.



La obra es de interés tanto para los estudiosos del Derecho Comunitario como para aquellos estudiosos de los modelos de distribución territorial del poder.