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Northumbria, 794 d.C. Quienes dominan los mares dominan la tierra. Y ésta es una verdad que nadie conoce mejor que los vikingos.
El rey de Northumbria sabe que debe actuar. Por eso, en cuanto ven llegar a nuevos invasores desde el mar, se ve obligado a construir sus propios barcos y a ponerlos bajo el control de Runolf, su ahora juramentado hombre del norte. Aun así, los vikingos no tardan en atacar, y será en Hunlaf, antiguo clérigo convertido en temible guerrero, sobre quien caiga la misión de persuadir al rey de Rogaland para firmar una alianza.
Sin embargo, Hunlaf y Runolf tienen otros plannes: en las lejanas tierras del norte, les esperan parientes que encontrar, viejas cuentas que saldar y un antiguo libro herético. Al llegar a su destino, decididos a enfrentarse a los salvajes y agrestes territorios nórdicos, se encuentran de repente en medio de la locura. Un esclavo se ha liberado de sus captores, y con fervor religioso, está llevando a sus fanáticos seguidores a una masacre, quemándolo todo a su paso. La sublevación ha estallado con violencia, y Hunlaf y sus compañeros se ven arrastrados hacia una noche de sangre y llamas.
Así continua la segunda entrega de "Tiempo de Espadas", que comenzó con "El nacimiento de un guerrero".
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