En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
Cuando sólo contaba 25 años de edad, James Dewey Watson tuvo la inteligencia, la inspiración y la fortuna de realizar, junto con su amigo Francis Crick, uno de los descubrimientos más decisivos en la historia reciente de la biología: la estructura en doble hélice del ácido desoxirribonucleico, o ADN. Eso ocurría en 1953, y lo que siguió fue una emocionante y durísima competición entre científicos e investigadores norteamericanos y europeos para continuar desentrañando los secretos de la vida. Por otra parte, Watson empezaba a conquistar la fama, pero aún tenía que conquistar a la chica de sus sueños.Este libro es el relato, rebosante de humor, ironía y nostalgia, de aquellos turbulentos y fascinantes años cincuenta y sesenta, de la incansable actividad de las mejores cabezas científicas de la época, así como de la intensa y a menudo disparatada vida social de los campus universitarios: las fiestas, los altibajos sentimentales, las novatadas entre colegas... Y entre todos destaca la imagen del legendario George, «Geo», Gamow, el gran físico de origen ruso a quien apasionaban tanto la genética como los juegos de cartas y el whisky.
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.