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La Sagrada Escritura... es el hablar de Dios en tanto que, por inspiración del Espíritu divino, es con-signado por escrito» (DV 9). Así ha entendido desde siempre la Iglesia el tesoro de las Escrituras, que conserva y transmite con la veneración que merece el testimonio apostólico. De ello da prueba el Enquiridion bíblico, recopilación bilingüe de documentos eclesiales (patrísticos, papales, conciliares, sinodales) acerca de la Biblia, desde el s. ti hasta el año 2001; muchos de ellos son de difícil acceso, y algunos no han sido publicados anteriormente en español. Los temas que trata son muy variados: principalmente el canon y la interpretación de la Sagrada Escritura, pero también la catequesis, la predicación, la liturgia, la espiritualidad, el derecho canónico y la disciplina eclesial; todos los aspectos, en fin, que guardan relación con el estudio y la transmisión de la Escritura. El Enquiridion muestra así su importancia en la vida de la Iglesia, y nos estimula a los cristianos del tercer milenio a escuchar con atención y disponibilidad renovadas la Palabra de Dios testimoniada en los Libros sagrados.
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