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La heterodoxia es el mejor término que define a Rafael Pérez Estrada. Fue rompiendo todas las hormas y todas las normas y fue asumiendo un riesgo creativo que él consideraba consustancial con el hecho mismo de escribir. Antonio Soler
Rafael Pérez Estrada (Málaga, 1934-2000) es un acontecimiento de la imaginación y del lenguaje. Poeta angular e inclasaificable de la poesía española contemporánea, actualizó y a la vez trasgredió todos los géneros literarios. Novelas de una sola página, poemas escenográficos, ensayos de una línea, aforismos, bestiarios, tratados... todo cabe en el arca solar de este poeta que cree que el canon posible es la medida del mar y que "poeta es el que espera". Así este libro, Jardín del Unicornio, que sólo vio la luz en una edición de autor en el año 1988, a la espera de ese lector imaginario que sepa desconfiar del poder porque "engendra caballos". No, lejos de las estructuras reduccionistas de la crítica más conservadora, Rafael Pérez Estrada no engendra caballos, engendra unicornios. Todo un tratado de imaginación trasgresora, es decir, de poesía, en su "cita urgente con la vida".
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