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La Ley 46/2002, de reforma parcial del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas delegó en el Gobierno la elaboración de un texto refundido del Impuesto sobre Sociedades. El Real Decreto Legislativo 4/2004 es el resultado de esta autorización. La aprobación de este texto vino justifi cada por la necesidad de introducir las numerosas modifi caciones sufridas por la Ley 43/1995 del Impuesto sobre Sociedades desde su entrada en vigor el 1 de enero de 1996 (corrección de la doble imposición interna, introducción de incentivos a la internacionalización de las empresas, regulación separada de la tributación de los no residentes, supresión del régimen de transparencia fi scal interna, regulación de las entidades dedicadas al arrendamiento de viviendas y de las entidades deportivas, mejora de los incentivos a la Investigación (I+D+i) y de adaptación a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, eliminación de las normas derogadas con posterioridad a la entrada en vigor el 1 de enero de 1996 de la Ley del actual Impuesto de Sociedades). La Ley 35/2006 inicia la primera fase de una nueva reforma del Impuesto de Sociedades, que será gradual y que tiene como objetivos mejorar las competitividad de nuestras empresas, lograr una mayor coordinación fi scal y adaptación a las tendencias fi scales de los países de nuestro entorno, y la simplifi cación del impuesto para lograr una mayor neutralidad en su aplicación. Todo esto se traduce en medidas como la reducción de tipos de gravamen, la eliminación o simplifi cación de los incentivos fi scales, y el retorno a un sistema clásico de no integración entre el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y el Impuesto sobre Sociedades (homogenización de la tributación del ahorro y supresión del régimen de sociedades patrimoniales). La Ley 16/2007 ha iniciado la adecuación de la normativa contable a las Normas Internacionales de Contabilidad y ha introducido algunos cambios en la Ley.