En algunas ocasiones las existencias pueden estar erróneas o no se lo podremos conseguir en el plazo señalado. Confiamos en su comprensión y le agradecemos la confianza depositada. Esperamos no defraudarle.
En El sendero de la mano izquierda, Fernando Sánchez Dragó dicta su primer testamento vital -muy vital- , aunque forzosamente provisional, porque el viaje de su existencia aún no ha terminado. El autor resume su personalísima filosofía -el arte de vivir (y también el de morir)- en ciento ochenta y un preceptos basados en el sentido común, en la cultura y, sobre todo, en la experiencia. Lo que aquí se nos brinda es u código de conducta subversivo, nietzscheano, pagano, más oriental que occidental, liberador, heterodoxo y radicalmente opuesto al discurso de la modernidad. Algunos de sus mandamientos no necesitan de explicación alguna; otros van acompañados e ilustrados por sugerentes estampas poéticas, filosóficas y narrativas.Un calendario espiritual, un juego -el vichâra- y un utilísimo diálogo sobre el elixir de la eterna juventud completan la obra, sometida en su conjunto a una sola condición: la de que el lector ponga en duda cuanto se le dice, pues no es el principio de autoridad, sino los de libertad y autogobierno, los que la animan. El resultado es una sorprendente invitación a la ética, a la sabiduría y, por ello, a la felicidad.
Este sitio web sólo utiliza cookies propias. Puedes configurar la utilización de cookies u obtener más información aquí
Más información sobre el uso de "cookies" y sus opciones de privacidad
Este sitio web utiliza cookies propias que se detallan a continuación en el panel de configuración.
A través del mismo, puede aceptar o rechazar de forma diferenciada el uso de cookies, que están clasificadas en función del servicio. En cada uno de ellos encontrará información adicional sobre sus cookies. Puede encontrar más información en la Política de cookies.
Estrictamente necesarias (técnicas):
Se usan para actividades que son estrictamente necesarias para gestionar o prestar el servicio que usted nos ha solicitado y, por tanto, no exigen su consentimiento.