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Poco puede hacerse para convertir a una señora fea en un dechado de hermosura. En cambio, cualquier mujer que se lo proponga puede adquirir elegancia y estilo, unas cualidades que solo exigen de nuestra parte cierta dedicación, algún dinero y mucho tacto. Nadie nace elegante, pero los sabios consejos de este manual, que apareció por primera vez a finales de los años cincuenta del pasado siglo, pueden hacer de nosotras unas damas dignas de un desayuno en Tiffany o de un paseo de la mano de Katharine Hepburn, sin que por eso tengamos que pedir un préstamo al banco.
Genevieve Antoine Dariaux, que durante muchos años dirigió la casa de modas Nina Ricci en París, no se limita aquí a combinar abrigos, sombreros, zapatos y bolsos, sino que habla también de la mejor manera de relacionarnos con los demás, de construir un mundo donde los detalles cuentan y cada cosa tiene su lugar.
Aunque hayan pasado más de cincuenta años desde su publicación, o justamente por eso, Muy chic es un texto delicioso y útil, un viaje hacia el pasado, ideal para cualquiera que durante unas horas se disponga a dejar de lado los tejanos y las camisetas desteñidas.

La opinión del editor:
En un mundo dominado por marcas y modas que son flor de un día, nos gustó este manual que desafía el tiempo y propone una vuelta a lo clásico en el mejor sentido de la palabra.