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El Boletín del Instituto Español fue el órgano de expresión del centro cultural del mismo nombre, una institución ideada por el jurista y diplomático Pablo de Azcárate que había sido creada en Londres en 1944 por un grupo de exiliados en Gran Bretaña partidarios de las posiciones políticas de Juan Negrín, presidente de la República en el exilio. Bajo la dirección del escritor Esteban Salazar Chapela, el Boletín del Instituto Español quiso ser, además de una «carta abierta» dirigida a los socios del centro, una «caja de resonancia (aunque de papel) de la cultura hispánica en Gran Bretaña». Muy bien acogida por el público desde la aparición de su primer número en febrero de 1947, la revista -que contó con el apoyo de prestigiosos hispanistas británicos- se publicó ininterrumpidamente hasta diciembre de 1950, fecha en la que cerró sus puertas el Instituto Español. Aquel «benemérito boletín» -en palabras del hispanista francés Marcel Bataillon-, que ahora ve la luz en edición facsímil, ha sido durante décadas una de las publicaciones del exilio republicano de 1939 más inaccesibles para los investigadores y para
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